Con un fuerte enfoque en la salud preventiva, el nuevo modelo de atención materno-infantil en Río Cuarto fue presentado como una política pública articulada entre el Ministerio de Salud de Córdoba y la Municipalidad de Río Cuarto. El objetivo: consolidar un sistema de salud “integrado, complementario y centrado en las personas y las familias”.
Ricardo Pieckenstainer, ministro de Salud provincial, destacó la necesidad de un nuevo enfoque. “Nuestra prioridad es fortalecer el sistema de salud en función de las familias, las mujeres, las embarazadas y los niños. Estamos conformando un equipo con una nueva visión que permita dar prioridad a la prevención y la atención de calidad”, afirmó Pieckenstainer, quien subrayó que el modelo apunta a trabajar en conjunto con el municipio para ofrecer una red articulada.
“El sistema de salud representa un trabajo articulado e integrado. Queremos brindar atención desde el comienzo del embarazo y continuar luego del nacimiento, con una mirada integral y complementaria”, destacó.
El intendente Guillermo De Rivas coincidió en la importancia de avanzar hacia un sistema preventivo. “Tenemos que poner toda nuestra experiencia y compromiso para conformar un equipo que priorice la prevención. La salud pública no puede seguir funcionando como compartimentos estancos. Necesitamos una atención integral que haga foco en las mujeres, en las embarazadas y en los niños, como núcleo esencial de nuestra comunidad”.
Uno de los ejes más innovadores de la propuesta fue detallado por el ginecólogo Diego Cagnolatti, quien liderará el área de Maternidad: “Lo primero que me preguntaron fue si íbamos a hacer partos. Y yo dije: no. No vamos a hacer más partos si la paciente no está sana. El parto es el resultado de un proceso saludable, no el punto de partida”, explicó con contundencia.
Según Cagnolatti, el nuevo sistema busca intervenir antes, con un enfoque integral y multidisciplinario. “Organizamos consultorios específicos en prevención del cáncer de cuello uterino, planificación familiar, salud mental, nutrición y cardiopatías congénitas. La mujer debe llegar al embarazo en óptimas condiciones. Solo así podemos garantizar partos saludables y evitar complicaciones como los nacimientos prematuros”.
Entre los recursos incorporados, se mencionaron colposcopías de última generación, equipos de ecografía fetal, monitoreo de vitalidad fetal, mamografías y atención pediátrica extendida de lunes a viernes, de 8 a 20 horas.
“Lo que queremos es una medicina más integral y preventiva. No estamos eliminando el parto, sino evitando que llegue como una emergencia. El embarazo debe planificarse, y para eso hay que actuar antes”, remarcó el especialista.
La iniciativa se completa con asistencia social, psicología y un fuerte trabajo territorial: “Estamos trabajando con políticas claras y sostenidas. Este es el camino hacia una maternidad saludable y digna”, concluyó Cagnolatti.
En tiempos de crisis del sistema sanitario, este programa busca cambiar el eje del modelo tradicional hacia una atención centrada en el bienestar previo y continuo de la mujer y el niño. Un desafío ambicioso que ya está en marcha en Río Cuarto.