Cumplimentando con otro de los proyectos seleccionados mediante el Presupuesto Participativo, se inauguró la tercera plaza TEA de la ciudad para que niños con trastornos del espectro autista puedan recrearse de manera segura.
El flamante espacio está ubicado en la esquina de calles Pierino Rosso y Juana Gorriti, cerca del Mercado de Abasto.
El intendente Guillermo De Rivas dijo que la plaza habilitada integra a la familia y felicitó a todos los que han contribuido para hacerla posible. “Este especio verde tiene una finalizar muy sentida por ser una plaza TEA. A la vez, es una muestra de que, a pesar de la crisis, seguimos ejecutando y cumpliendo el compromiso asumido con los vecinos. En ese sentido, es importante decir que nada de esto sería posible si no existieran vecinos comprometidos en pensar y proponer lugares como este. Hoy Río Cuarto ya cuenta con tres plazas TEA”, remarcó el Intendente.
María Reineri, subsecretaria de Participación Ciudadana, explicó las características de las plazas TEA y comentó que también se pintó un mural para darle más color al espacio. “Estamos hablando de la construcción de una plaza sensorial para niños y niñas con TEA. La particularidad que tiene es que es una plaza cercada, con espacios de calma y con juegos sensoriales para estimular los sentidos. A la vez, contamos con el aporte artístico de Emilia Floriani, quien pintó un mural”, detalló la funcionaria.
Reineri comentó que el proyecto se confeccionó a partir de la unificación de distintas propuestas que se presentaron de manera individual y destacó la organización y la colaboración de los vecinos.
Satisfacción
Anabela Báez y Graciela Aguilar, dos de las vecinas que impulsaron la iniciativa, se mostraron emocionadas por el logro e invitaron a toda la comunidad a visitar el espacio. “Nosotras seguimos el camino que iniciaron otras mamás con las plazas de Luis Rinaudi y de barrio Alberdi. Estamos muy contentas, con mucha alegría porque se materializó el proyecto. Hay muchas familias detrás de esto y que se haya podido lograr es muy bueno”, afirmó Anabela.
“Tenemos hijos con autismo y nos sentimos agradecidas con las familias que nos han acompañado en este trayecto. El lugar está ambientado para que vengan todos los niños, tengan o no diagnóstico TEA, ya que la idea es compartir entre todos”, sostuvo Graciela.